En estos días tan especiales que todos estamos viviendo, debido a la pandemia del covid-19, en que nos sentimos tan vulnerables, inquietos ante lo que nos pueda suceder, confinados a nuestros domicilios, obligados a cambiar nuestras hábitos, salidas, etc. ¡NO TODO ES NEGATIVO!
Estas circunstancias nos ofrecen la oportunidad de estar más tiempo con nuestros familiares, de intensificar las relaciones, de disfrutar más los unos de los otros, de recuperar algunos valores que quizás hemos tenido un poco descuidados. También en nuestras Casas, ahora que no podemos recibir las visitas de voluntarios ni amigos, tenemos la ocasión de fortalecer nuestros lazos afectivos, disfrutar de momentos de ocio. Intensificar la oración… Todo aquello que nos facilita el vivir el carisma de la Institución y se concreta en nuestras Constituciones.